La puerta trasera de la Parroquia de San José Obrero se abría tras dos años. Un Domingo de Ramos especialmente ilusionante por lo que supone: volver a tener una Semana Santa tal y como se recuerda. Afortunadamente, el tiempo dio tregua y no ha habido alerta por precipitaciones.
A las 10h. veía la luz la cruz de guía de la Hermandad de Nuestro Señor Jesucristo en su Entrada Triunfal en Jerusalén, María Santísima de la Alegría, San Juan Evangelista, San Pedro y Santiago Apóstol. El primero en salir fue el paso de misterio, que representa a Nuestro Señor Jesucristo en su entrada a Jerusalén, obra de Lourdes Hernández Peña. Los costaleros demostraron su buen hacer en una calle Santa maría Rosa Molas repleta de gente. Es el día de ponerse las mejores galas para ver a la primera hermandad de nuestra semana de pasión. La Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de la Columna «El Amarrado», de Ávila, fue perfecta para que la imagen bailara con sus sones y se luciera durante todo el recorrido.
Después se abría paso María Santísima de la Alegría, y precisamente alegría era lo que demostraron sus costaleras de poder volver a llevar a su virgen bajo el paso de palio. Y es que precisamente este año, es la Virgen la que protagoniza los «estrenos». Las costaleras iban bajo una nueva parihuela de madera, realizada por José María Higuera. Además, se lucían a pleno sol las nuevas bambalinas diseñadas por José Manuel de Haro. La delantera y trasera además, totalmente bordadas por la parte exterior e interior, con un diseño digno de la importancia de esta imagen mariana. Los acólitos también pudieron lucir los nuevo ropones, albas y dalmáticas en blanco y oro, también de José Manuel de Haro. La Agrupación Musical «Santa Cecilia», de La Carolina, completaba a la perfección el tercio de la Virgen.
Tras la salida, recorrieron calles como Áurea Galindo, Los Francos, pasando por la Plaza del Ayuntamiento, Carnecería, Campanario, Huarte de San Juan, Cánovas del Castillo, Teniente Ochoa, Marqués de Linares, Zabala o Sagasta. A las 13h., la hermandad estaba puntual en la Carrera Oficial (Isaac Peral), luciendo sus pasos e imágenes en todo su esplendor. Para volver al templo, el cortejo continuó por la calle Baños, Palma del Río, Santiago, Velázquez y de nuevo Aurea Galindo para volver a su casa a las 15.30h. de la tarde.
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