Con calma pero con gran optimismo, el comité de empresa de Gestamp Linares, firma dedicada a la producción de componente para el sector automovilístico, se muestra satisfecha con las últimas previsiones de producción dadas a conocer por la dirección de la factoría y que supondría un incremento de la actividad productiva a partir del segundo semestre del año.
«Parece ser que van a llegar proyectos gracias a la oferta de nuevos productos y eso va a generar más carga de trabajo», explica el presidente del comité de empresa, José Garrido, quien señala que pese a ello se mantiene activo el expediente de regulación de empleo aprobado hace poco más de un año y cuya fecha de expiración tendrá lugar el próximo 30 de julio.
Condiciones
En concreto, del actual ERE, el tercero que se desarrolla de forma consecutiva en la planta linarense y que recogía entre sus acuerdos el mantenimiento de la totalidad de los puestos de trabajo hasta 2018, contemplaba 25 días sin empleo para la totalidad de los 136 trabajadores de la plantilla en los primeros seis meses de 2016, tras desarrollarse 50 a lo largo del pasado año, «aunque es posible que no se ejecuten» pues desde hace dos meses ningún trabajador se ha visto afectada por esta medida ante la existencia de una significativa carga de trabajo.
Poco se ha adelantado sobre los nuevos proyectos en cartera para el fabricante de componente automovilísticos, si bien las nuevas cargas productivas se limitarán a este sector productivo, mientras se mantiene sin actividad la planta dedicada a la fabricación de componente para la industria de las energías renovables, cerrada hace dos años ante la falta de nuevos pedidos. «La eliminación de las ayudas a este sector obligó a paralizar la actividad de esta nave ante la falta de pedidos y creemos que no será posible retomar esta actividad hasta que no existan de nuevo medidas de apoyo para el sector desde el Gobierno», reconoce el presidente del comité sobre la situación del sector.
Año en positivo
La llegada de nuevos proyectos a la planta de Gestamp en Linares gracias al desarrollo de nuevo proyectos supondrá cerrar una de las etapas más difíciles para la fábrica de componentes automovilísticos que desde el inicio de la crisis en el sector, a la que posteriormente se le sumo la caída de proyectos en energías renovables, ha generado años de numerosas medidas transitorias para capear la falta de cargas de trabajo.
En concreto, en 2008 concluía una bolsa de horas que se creó debido a la caída de producción en el sector de la automoción. Un año más tarde, y con un sector cada vez más deprimido, se aprobó un expediente temporal de 130 días que afectó prácticamente toda la plantilla, al igual que el ERE de 2010, año en se terminó por ampliarse varios días más. En aquella ocasión se acordó favorecer las bajas voluntarias, la creación de una bolsa de trabajo y los traslados temporales a otras plantas del grupo hasta la llegada de más actividad, en su mayoría relacionada con energías renovables que poco después sufría la eliminación de las ayudas al sector.
De este modo, en los últimos cuatro años desde Gestamp se ha apostado por mantener los puestos de trabajo existentes lo que, sin embargo, ha obligado a mantener la actividad productiva ‘a ralentí’ a través de diversos ERE temporales cuya fecha de caducidad, al menos de momento, parece expirar en el primer semestre de este año. Irene Téllez. IDEAL.
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