El CAPI de Los Sauces retoma sus actividades tras el pago de la Junta

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Formación. Usuarios del CAPI de Los Sauces, en una fotografía de archivo.

La actividad formativa regresa, tras varios meses de “parón por cierre forzoso”, al Centro Público de Acceso a Internet (CAPI) con el que cuenta, en sus instalaciones, la Asociación de Vecinos Los Sauces. Debido a los impagos, por parte de la Junta de Andalucía, de las ayudas que se conceden a este tipo de centros en la provincia, el de “Los Sauces” se vio obligado a cerrar sus puertas por no poder afrontar los gastos que se generaban de la actividad que presta. Ahora, una vez que se ha retomado el abono de las cuantías pendientes, se pone en marcha este servicio en la barriada de La Zarzuela.

El centro aún tiene “en el aire” las cuantías que corresponden a los 18 meses, de 2014 a 2015

“Durante febrero, la Junta ha comenzado a pagar parte de lo que se adeuda, correspondiente al segundo semestre del año 2015, aunque no todo, pero sí lo suficiente como para arriesgarnos a empezar el funcionamiento, de nuevo, en el CAPI. Esto lo haremos hasta que terminen de pagarlo y abonen el resto de lo que nos deben o la nueva convocatoria de este año. Y, aunque parte de este dinero habrá que devolverlo y, seguramente, con intereses, correremos el riesgo y abrimos, sobre todo, por los usuarios que nos han apoyado desde el principio y con los que nos comprometimos a abrir lo antes posible”, apuntó el presidente de la Asociación Los Sauces, José Ruiz.

Desde el mes de junio, el CAPI de Los Sauces dejó de prestar servicio al no recibir el 25 por ciento restante de la subvención correspondiente al proyecto formativo que iba desde el 1 de enero de 2014 hasta el 30 de junio de 2015. Una cuantía a la que también se agregó la del segundo semestre de 2015, de ahí que el centro decidiera cerrar, de forma temporal, para evitar la acumulación de cada vez más gastos. “Hemos luchado, durante este tiempo, para que se nos abonaran las cantidades correspondientes a estos periodos, 11410,57 euros respectivamente en cada uno, pero la solución no llegaba y la situación de falta de liquidez se mantenía”, recordó José Ruiz.

Una vez realizado el primer pago, aún siguen pendientes las mensualidades que corresponden con el periodo de 2014 a 2015, que confían llegue a la “máxima brevedad” puesto que “aún está en el aire”.

Pese a todo, desde el CAPI y la propia Asociación Los Sauces confían en que “a partir de ahora, no se salten las resoluciones y las acaten” porque, de no hacerse, “el centro se vería obligado a volver a suspender, de nuevo, las actividades, en contra de su voluntad”. Así, se retoman los cursos y talleres propios para el acceso a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, de tal manera que, a lo largo de estos días, el ritmo normal se irá asentando en las instalaciones. Unas labores que, desde el pasado verano, se vieron privadas de continuidad, afectando a numerosos usuarios. Juan José García Solano. JAEN.


La paralización perdura durante varios meses

Fue a mediados del pasado mes de julio cuando los CAPI de Los Sauces y Arrayanes se vieron obligados a echar el cierre por los impagos de parte de las subvenciones a los que tiene que hacer frente, de forma anual, la Junta de Andalucía. En el caso del centro de Arrayanes, la deuda ascendía a unos 11.000 euros del programa que se ejecutó entre el 1 de enero de 2014 y el 20 de junio de 2105. “Nos hemos visto obligados a cerrarlo porque es imposible que podamos seguir soportando gastos si no recibimos el dinero”, apuntaba Francisco López, presidente de la Asociación de Vecinos Arrayanes Sur 520 Viviendas. Esta situación obligó a tener que despedir, temporalmente, a las dinamizadoras de este servicio, que también permanecieron varios meses sin cobrar sus respectivos salarios. En cuanto a usuarios, centenares de personas se vieron privadas de su asesoramiento informático.


En detalle

Malestar. El retraso en el pago de las subvenciones no se trata de una situación novedosa para los centros linarenses, de ahí que ya mostraran su

“malestar”, el pasado verano, por esta situación.


RECORTES. Además de los impagos, también se realizaron recortes en las ayudas que se recibían, por parte de la Junta de Andalucía, para afrontar otros gastos de los centros, tales como sistemas de seguridad y facturas de otros gastos.

PLAZO. A finales del año pasado, la Junta de Andalucía, a través de la Delegación Territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, anunció el inicio de los pagos atrasados a diferentes centros CAPI de la provincia de Jaén. En ese millón de euros inicial no se contempló el de Los Sauces.

EMPLEO. Este CAPI, además de prestar servicios de asesoramiento en materia informática y nuevas tecnologías, también atiende derivaciones del SEPE y el SAE para realizar trámites relacionados con búsqueda activa de empleo. Juan José García Solano. JAEN.


 

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