Luis Sánchez ha realizado una gran labor durante la pandemia. Y es que de forma altruista comenzó a buscar material sanitario al ver el déficit que había en los centros de salud, hospital y residencias de la ciudad. La empresa Bandesur, de Alcalá la Real, fue la primera que le ofreció pantallas faciales de plástico reciclado para poder repartir. Seguidamente fueron costureras de Castillo de Locubín quienes se encargaron de realizar batas, gorros y mascarillas para poder distribuir.
El último reparto ha sido esta mañana, en el Centro de Salud Virgen de Linarejos, donde ha entregado 40 Equipos de Protección Individual para los sanitarios. La donación ha tenido una gran acogida y todos los trabajadores han agradecido este gesto de solidaridad.
Según Sánchez, con este último reparto queda cubierto todo el personal sanitario de la ciudad. «Mi objetivo es que no se contagie ningún sanitario que esté velando por nuestra salud de covid-19. Comencé a moverme cuando no había mascarillas ni material de protección y estoy muy orgulloso de haber podido conseguir lo que quería». En total ha donado unos 550 EPIs y 2600 pantallas faciales . Agradece al Ayuntamiento de Bailén, su ciudad natal, la ayuda que le han prestado. «Como opinión me gustaría decir que ya que no se va a gastar el dinero previsto para la feria y diferentes fiestas de la ciudad, este podría emplearse en hacer pruebas masivas a toda la ciudadanía, incluida la Estación Linares-Baeza».
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