El «alma» de la extinta Santana

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El Land Rover Defender, que en Linares se fabricaba con la licencia de Santana, tiene los días contados. Así, el próximo 31 de diciembre de este año cesará su producción, por lo menos en Europa, después de casi 70 años de fabricación casi ininterrumpida, si se cuenta a sus ascendientes directos, los modelos o series clásicas, más conocidos en España por fabricarse en la ciudad.
 “Durante más de 40 años este vehículo le ha dado riqueza a Santana, a Linares y su comarca”, aseveró uno de los trabajadores que, en la última etapa de la factoría, fue el presidente del comité de empresa, Pedro Gálvez. En este sentido, recordó que, inicialmente, Santana se dedicó a la fabricación de maquinaria agrícola, hasta que llegaron los ingleses” y se autorizó la fabricación del Land Rover. Comenzaron en torno a la década de los sesenta, y diez años después se producían desde Linares para toda Latinoamérica o para el norte de África,  aunque también recuerda Gálvez que tuvieron una presencia importante durante la guerra de Irán.
Una industria boyante que según, recordó Pedro Belinchón  —que durante 35 años trabajó en la fábrica y que ha recogido su historia en obras como “La leyenda continúa…” y “2.400 ni uno menos. Linares símbolo de Andalucía”—, en sus primeros años daba trabajo a más de 5.000 familias y, de hecho, fue un símbolo para todo el mundo en Andalucía. Luego llegaron los japoneses, “que querían introducirse en el mercado europeo para lo que Santana les vino muy bien”, y lo que conllevó la reducción en la plantilla entre otras cuestiones, hasta que en 2005 la italiana Iveco, sobre la estructura del Land Rover, comenzó la fabricación de los vehículos que se comercializaron bajo su marca.
“Se trataba de un símbolo, la única empresa de coches que hemos tenido en Andalucía, y que quizás podía haber alargado su vida laboral. Primero dependió del Ejército, después también de la situación en España, porque cuando hay crisis la hay para todos. Después, el mercado general que se inclina más por unos coches que por otros, y para mí lo que terminó de hundirla el hecho de que los ingleses con el Land Rover se retiraran de Santana. Fue el pilar fundamental para que se viera prácticamente bajo cero y tuviera que echar mano a cualquier empresa que le interesara”, aseveró Belinchón. Mariela Soriano. JAEN.

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